José Luis Spaltro
A lo largo de 43 años en el oficio -en la Seguridad y la Información- me encontré por distintos motivos, con personas cuya capacidad intelectual e inteligencia, realmente me sorprendieron.
Con otras en cambio, su brutalidad, ineficiencia y obsecuencia no me llamaron la atención, pese a tener cargos bien remunerados y depender de la máxima Conducción.
Unos y otros estaban bien informados o al menos, sabían escuchar y captar datos de interes, sin que sus rostros denotaran sorpresa.
Esa hábil captación, les ha servido en el momento oportuno, para demostrar frente a cualquier nivel, sus buenos contactos y seguras fuentes informativas.
A los primeros:
- Para elaborar planes y resolver situaciones conflictivas, ejerciendo la debida prevención -con la suficiente antelación-
A los segundos:
- Para cubrirse y mantenerse atornillados a sus asientos de Gerentes, Jefes o Asesores de Seguridad.
Con el avance tecnológico, las fuentes informativas se multiplicaron y su acceso es cada vez más rápido (y económico). Internet facilitó ese acceso, que antes se lograba en clandestinas reuniones con pseudos referentes que decían "tener la posta o la papa" -o sea: info de primera-.
A pesar de la facilidad (y economía) muchas veces encontrar el dato buscado no es simple o es poco confiable
Estar informado -en el sentido estricto de nuestro oficio- no es solo leer y escuchar, es:
- Analizar, con criterio
- Con fundamentos
- Evaluar las implicancias inmediatas o a corto plazo, además de la probable evolución de los hechos, muchas veces en minutos.
La Información sigue siendo el pilar de la Seguridad y cuanta más Información, si es posible depurada obtengamos, mejor Seguridad podremos ofrecer.
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